Viernes, 19 de abril de 2024
La perversión (¿del lenguaje?) compartida
Singularidad catalana
Llegado el momento previsto "después de la cascada in crescendo de
ilegalidades consentidas por los gobiernos centrales de turno " done el "poli malo", Mas
y su cuadrilla- han ido ganando terreno para sus delirios independentistas, le toca el
turno de la representación teatral a las cuadrillas de "polis buenos". En esta mascarada
está previsto vendernos el "evitar el mal mayor", mediante la cesión y el reconocimiento
de lo previamente pactado, con el envoltorio buenista del llamamiento a la "reflexión y a
la concordia".
Para ello, en este panfleto abogan por estudiar si la "singularidad" de Cataluña
es "reconocida y valorada de manera justa" en nuestra Constitución, con el objetivo de
responder a las "aspiraciones legítimas de los catalanes". ¿Para cuándo el estudio del
reconocimiento y valoración justa de la singularidad de Castilla, Asturias,
Extremadura, Villatempujo de Arriba, mi barrio, mi calle, etcétera, para dar la
respuesta pertinente a nuestras legítimas y diferenciadas aspiraciones? ¿Esta
singularidad implica también que en el resto de las comunidades autónomas se puedan
incumplir las leyes y las sentencias de los tribunales, se persiga a quienes pretendan
hablar la lengua oficial mayoritaria del Estado, o se inyecte en vena de generaciones y
generaciones una historia ficticia, por sólo citar algunas de estas singularidades?
Sin embargo, hay que reconocer que realmente existe un poderoso hecho
diferencial en Cataluña respecto a otras autonomías. Su tozuda perseverancia para ser
considerados diferentes doblegando en general a todos los gobiernos de la nación y en
forma particular al presidido por Mariano Rajoy.
La Fundación España Constitucional, como pomposa y equívocamente se hace
llamar este grupo, dice que quieren "evitar que se abra una enorme crisis de
convivencia", ignorando la gigantesca crisis abierta ya hace tiempo, no sólo entre
Cataluña y el resto de España, sino entre los propios catalanes.
Este grupo de transgresores de dignidad de la nación, y en línea con el gran
engaño planificado, pide el derecho a decidir, para todos y entre todos, para evitar "
según dicen " un golpe de Estado. Como si este golpe de Estado no hubiera comenzado
ya hace años, como bien saben algunos de sus integrantes.
Toda esta sarta de insensateces, en el mejor de los casos, marca el camino para
adelantar lo que unos y otros buscan: un cambio de la Constitución, por la puerta
falsa, para ajustarse a los perfiles singulares de Cataluña. Sospecho que este anuncio
nos lo venderá, de nuevo, el ministro de Asuntos Exteriores (al parecer el más adecuado
y competente para un asunto de integridad nacional) haciendo de ventrílocuo de Rajoy,
lanzando la oferta que tienen preparada para el próximo debate con el independentista
Junqueras.
Pobre Albiol. Y pobres de nosotros, secuestrados por estos tipos y demás extras
y comparsas al servicio del lado oscuro de la fuerza
Comentarios
Por JM 2015-10-08 14:16:33
Yo también soy singular, diferente, única y encima mujer ¿y?
Por Juan Nadal 2015-10-02 11:48:43
La singularidad catalana, yo no veo otra que el idioma, convertido ya en lengua cooficial, no puede convertirse en una fuente de privilegios. Lo de la historia y cultura propios son perticularidades comunes a los demás territorios nacionales; acaso Castilla o Asturias, por ejemplo, no tienen una cultura y una historia propias.
Por María Alú 2015-09-25 00:01:34
Pocas veces se lee tan claramente expuesto las necedades del nacionlismo catalán que serían solamente grotescas sino fuera porque la pusilanimidad cómplice de los líderes nacionales ha llegado a convertirlo en trágico. Magnifico Ana Maria
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