"Si en este proyecto se protege más que en el anterior, se pasa de ley de plazos a ley de supuestos, se admite la objeción de conciencia como derecho, que es un derecho humano, del personal sanitaria, si al mismo tiempo se  busca proteger al no nacido y no se considera el aborto como un derecho sino realmente como un conflicto, pues lógicamente es menos mala que la actual", ha indicado en una rueda de prensa ofrecida en la sede de la CEE en Madrid, después de celebrar la Comisión Permanente el pasado miércoles y jueves.

   Dicho esto, Gil Tamayo ha manifestado que "toda ley del aborto es mala y que nunca se puede legitimar la muerte de un inocente". "El aborto por malformación no es negociable. La muerte de un inocente no es la solución a la malformación", ha recordado, para después añadir que "no se puede establecer ahora un punto de concordancia con el ser más débil e inocente" y ha pedido hacer una "opción por la vida con todas sus consecuencias" y "no tarifar la vida humana con unas categorías de calidad".

   El portavoz de los obispos ha defendido que la CEE "siempre saludan las iniciativas a favor de la vida humana vengan de donde vengan" y especialmente aquellas dirigidas a "proteger la vida de los más débiles". De esta manera, ha asegurado que comprende la "situación dramática, de dolor y sufrimiento" de quienes se ven en esa situación y ha afirmado que se ha hecho "poco para acompañar adecuadamente a las mujeres que se encuentran en situaciones muy duras".

   Según los obispos, "a todos incumbe" resolver estas situaciones "por el camino de la solidaridad y la vida y no por el de la muerte de un ser inocente". Además, ha añadido que "una sociedad madura y democrática que aprecia la vida la ha de apreciar con todas sus consecuencias y ha de ofrecer políticas de justicia en favor de la familia" y que los legisladores deben dar "ayuda" a los padres que sufren esas situaciones.

   Gil Tamayo ha recordado que la posición de la Iglesia católica sobre este asunto es "defender el derecho a la vida de todos ser humano inocente como patrimonio común de la raza humana" y ha agregado que, recientemente, el Papa Francisco afirmaba que "la paz se ve herida por cualquier negación de la vida humana".

   "Mencionó entre otros horrores de la cultura del descarte el hecho de que muchos niños no lleguen  nunca a ver la luz víctimas del aborto", ha destacado, al tiempo que ha indicado que el Papa "señaló de manera coherente" que el aborto "no es un asunto sujeto a supuestas reformas o modernizaciones porque no es progresista pretender resolver los problemas eliminando una vida humana".