Grecia y Frontex tienen ahora cinco días laborales para acordar un plan operativo tras la decisión del director ejecutivo de la agencia europea, Fabrice Leggeri, de activar el mecanismo Rabit, que Atenas solicitó activar el pasado jueves.

   "El despliegue de Rabit nos permitirá aumentar el número de patrullas tanto en mar como en tierra, lo que significa que más inmigrantes serán identificados y registrados adecuadamente en cuanto lleguen a las islas griegas", ha explicado el director ejecutivo de Frontex en un comunicado, en el que ha precisado que básicamente el lanzamiento de Rabit "significa aumentar la operación marítima Poseidón".

   De los más de 700.000  inmigrantes que han alcanzado las islas griegas procedentes de Turquía en lo que va de año, sólo uno de cada cinco ha sido interceptado en las costas.

   El nuevo despliegue sustituirá a la actual operación Poseidón, aunque cubrirá un área operativa similar, según ha precisado la agencia europea.

   Frontex mantiene desplegados en la actualidad en las islas del Egeo 16 barcos y más de 260 agentes para asistir en el registro de nuevas llegadas, así como agentes de vigilancia de fronteras y otros expertos de documentación.

   La agencia ha confirmado que los 448 efectivos ofrecidos por los Estados miembros de los 775 agentes de fronteras que solicitó en octubre para sus labores participarán en el despliegue de Rabit y Grecia por su parte también tendrá que aportar un número de agentes adicionales para trabajar conjuntamente con los expertos europeos sobre el terreno.

   Al margen del aumento de agentes y equipos como barcos y coches patrulla que se desplegarán a las islas griegas, la nueva operación procederá también a realizar controles de seguridad cotejando las bases de datos nacionales y paneuropeas después de las informaciones que alertan de la posible entrada de terroristas yihadistas que se hacen pasar por refugiados. Agentes dedicados a los controles de seguridad trabajarán junto a expertos para registrar a los inmigrantes.

   A diferencia de la participación en las operaciones de Frontex regulares, que son voluntarias, los Estados miembro tienen obligación de aportar efectivos y equipos para los despliegues de los equipos de intervención rápida.

   Los despliegues en el marco del mecanismo Rabit, que sólo ha sido activado una vez en octubre de 2010 por Grecia en su frontera terrestre con Turquía en la región de Evros y terminó en marzo de 2011, puede durar hasta tres meses, aunque se pueden extender hasta tres meses más.