Después de que el Gobierno haya anunciado que Sánchez se reunirá la próxima semana con los líderes del PP, Ciudadanos y Unidas Podemos para analizar los resultados de las elecciones generales y hallar acuerdos, fuentes del partido naranja han asegurado que Rivera va a manifestarle su propósito de liderar la oposición.

Además, han indicado que en la reunión del martes --Albert Rivera está convocado a las 11:00 horas en la Moncloa-- también se avisará a Sánchez de que Ciudadanos va a defender en esta legislatura "a las familias de las clases medias de sus subidas de impuestos y la igualdad y libertad en todos los rincones de España".

Sin embargo, el líder de la formación ya advirtió en una entrevista en Telecinco que su partido no hará presidente a Pedro Sánchez, y por ello, rechazó las presiones del mundo empresarial y de la banca para pactar con el PSOE. También reconoció que el PSOE "tiene la obligación de formar Gobierno" y que tiene "la mayoría para hacerlo", sumando con Unidas Podemos y contando con partidos nacionalistas e independentistas.

En este sentido, Ciudadanos sigue firme en que su función será vigilar que se cumple la Constitución y controlar al Gobierno para que no "destroce" la economía, desempeñando un papel de oposición, por lo que ha vuelto a rechazar la posibilidad de que su partido llegue a un acuerdo con el PSOE.

Moody's cree que un Gobierno de PSOE y

Ciudadanos sería más proclive a hacer

reformas estructurales

La agencia de calificación Moody's cree que un Gobierno de coalición entre el PSOE y Ciudadanos sería el más proclive a poner en marcha reformas estructurales.

No obstante, Moody's subraya en una nota que un Gobierno en solitario del PSOE podría también funcionar bien, como en otros países europeos como Portugal e Irlanda.

En este sentido, destaca que la posición del PSOE es ahora "significativamente más fuerte" que en la anterior legislatura, lo que permite un horizonte de mayor estabilidad al Gobierno.

Moody's indica que el desafío es ver si el próximo Gobierno tiene mayoría suficiente para facilitar el avance de las reformas macroeconómicas y fiscales, y garantizar la sostenibilidad de la economía y del sistema de pensiones.

La agencia de calificación reconoce que los esfuerzos para abordar los desafíos económicos y fiscales se han estancado en España desde las elecciones de diciembre de 2015 por "la sucesión de Gobiernos minoritarios que carecieron de la capacidad para aprobar leyes sustantivas o abordar las debilidades estructurales de las finanzas públicas".

Por último, cree que los riesgos políticos derivados de las tensiones con los independentistas en Cataluña "deberían mantenerse más contenidos dada la postura menos conflictiva del PSOE".