La apuesta del gigante de la distribución por el mundo del arte contemporáneo con un espacio propio, que se abrirá coincidiendo con el inicio de la campaña navideña, es una de las principales novedades que aporta el nuevo centro de Castellana, el "buque insignia" del grupo.  

  Bajo esta iniciativa, El Corte Inglés realizará exposiciones temporales de autores consagrados junto a otros nóveles, cuyas obras estarán a la venta en el propio espacio expositivo, siguiendo la dinámica habitual de cualquier galería de arte.

   "El Espacio de las Artes se plantea como un punto de encuentro con el que acercar el arte contempráneo al gran público", subrayaron desde el grupo, que inaugurará su galería con una exposición dedicada a la escultura española de los siglos XX y XXI.  

  Este proyecto es también una continuación del interés y la vinculación que El Corte Inglés mantiene desde hace décadas con el mundo de las artes. Así en 1963, los escaparates del centro de Preciados (Madrid) acogieron una exposición inédita y pionera en aquel momento con artistas de la talla de Manrique, Millares, Rivera, Rueda, Sempere y Serrano.

   La apuesta por el arte contemporáneo se ha seguido manteniendo a través de un programa expositivo que se retomó en 2005 en recuerdo de aquella primera muestra a través de los escaparates, y que ya cuenta con siete ediciones.

  Desde entonces y coincidiendo con las actividades que cada año se celebran con motivo de ARCO, El Corte Inglés ha llevado a cabo una serie de exposiciones dedicadas al arte más actual.

   "El Espacio de las Artes" se suma a la oferta del nuevo centro de Castellana, que ha supuesto una inversión total de más de 300 millones de euros y cuenta con una plantilla de 3.300 empleados y 70.000 metros cuadrados de superficie de uso comercial.  

  Dicho centro cuenta con otros espacios como los de Gourmet Experience, Lujo, Relojería y Joyería y Espacio de Belleza y Salud, el segundo que el grupo de distribución inaugura tras el del madrileño centro de Callao.  

  A pesar del actual entorno de crisis económica, caracterizado por un deterioro del consumo, El Corte Inglés continúa con su apuesta por la expansión y el crecimiento, con inversiones que superaron los 1.000 millones de euros durante 2010, destinadas en su mayor parte a la construcción de nuevos centros comerciales, así como a la remodelación de establecimientos.