"La Comisión lamenta ver este aplazamiento, (Francia) debe dar prioridad a los tramos transfronterizos, algo que no se contempla en el informe", han indicado fuentes comunitarias a Europa Press, preguntadas por la última 'hoja de ruta' presentada por la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, sobre las inversiones que el Gobierno galo prevé en el sector del ferrocarril.

Los servicios comunitarios valoran positivamente que Francia prevea una inversión de 100.000 millones de euros en el sector ferroviario de aquí a 2040, porque es "mucho más de lo esperado", pero observa con preocupación que el gasto no esté dirigido a la red prioritaria transeuropea.

El programa de transportes francés debe ser aún detallado de aquí al verano y es visto como una "base" para avanzar, precisan las fuentes, lo que implica una negociación previa entre las regiones y el Gobierno central.

En todo caso, a la luz de la información disponible, Bruselas entiende que ello implica que la nueva línea Burdeos-Dax para unir con alta velocidad el territorio galo con la Península Ibérica no estará completada hasta 2042, lo que supone un retraso de más de una década respecto a la fecha de 2030 consensuada con la UE.

A ojos de los servicios comunitarios el programa de inversiones debería dar "prioridad" a los tramos transfronterizos, algo que "no queda recogido en el informe" de las autoridades francesas y por el que la Comisión Europea prevé contactos técnicos en las próximas semanas para pedir explicaciones.

El "sustancioso" presupuesto previsto para el ferrocarril francés no responde a las prioridades de la red transfronteriza europea, no sólo en el caso del tramo del Corredor Atlántico, sino tampoco en el de otros tramos previstos en el Corredor Mediterráneo, como es la unión entre Montpellier y Perpiñán o la ruta Lyon-Turín.

En el caso preciso de la conexión de alta velocidad entre Dax y la frontera española en Hendaya, las fuentes comunitarias señalan que "no hay claridad" en lo que respecta a su desarrollo y apunta que Francia únicamente prevé la "rehabilitación" del tramo existente.

"En cualquier caso, la rehabilitación de la línea existente no es suficiente en términos de capacidad en comparación a la de la 'Y vasca'. Sin una nueva línea se creará un cuello de botella en la frontera francesa", han explicado las fuentes.

"Los planes de Francia no son compatibles con las obras llevadas a cabo por España en la 'Y vasca'", añaden desde el Ejecutivo comunitario, conscientes de que el Gobierno español sí mantiene el objetivo de "completar la 'Y vasca' antes de 2030".