La Comisión Europea ha dicho este lunes que no va a comentar las declaraciones del primer ministro griego, Alexis Tsipras, en las que acusaba este fin de semana a España y Portugal de bloquear las negociaciones para prorrogar el rescate griego; pese a confirmar que ha recibido una queja del Gobierno español solicitando a Bruselas que se pronuncie.

   "Hemos recibido una queja, que incluye una petición de comentario", ha explicado en una rueda de prensa la portavoz comunitaria Mina Andreeva, quien ha precisado que la queja no se ha recibido por carta formal, sino a través de "contactos durante el fin de semana" y "a distintos niveles". Portugal también ha hecho llegar su malestar a Bruselas por las mismas vías, ha añadido.

   Preguntada por si el jefe del Ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, va a atender a la petición del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, Andreeva ha advertido de que "no es el momento de declaraciones" y ha pedido que los esfuerzos se centren en que "las autoridades griegas cumplen sus compromisos" con el eurogrupo y las instituciones.

   A la cuestión de si el Tratado de la Unión Europea establece límites sobre las declaraciones que un jefe de Estado o de Gobierno europeo puede hacer sobre alguno de sus socios, Andreeva ha sido tajante al recordar que "hay un artículo sobre la libertad de expresión".

   "Mantenemos un contacto estrecho con las partes implicadas, pero subrayamos el papel como mediador de la Comisión Europea", ha indicado la portavoz, para evitar pronunciarse sobre las acusaciones de Tsipras.

   "No es nuestro papel hacer comentarios sobre comentarios", ha insistido, para después subrayar que "más importante que las declaraciones públicas es el compromiso" de Atenas con sus socios del eurogrupo. La tarea de la Comisión, ha añadido, es trabajar "por la unidad" de los Estados miembros.

   Andreeva tampoco ha querido aclarar si Juncker ha hablado sobre este asunto con Tsipras o con Rajoy y ha apuntado que el jefe del Ejecutivo comunitario mantiene contactos constantes con los líderes europeos, que no ha querido detallar. Sí ha apuntado que los servicios de la Comisión han "tomado nota" del malestar de los Gobiernos portugués y español y que éste se trasladará a Juncker.

   La agenda de Juncker para esta semana incluye u participación el miércoles en Madrid en una cumbre sobre interconexiones energéticas en la que estarán Rajoy y el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, además el presidente francés, François Hollande.

   El embajador de España ante la Unión Europea, Alfonso Dastis, trasladó este fin de semana al Ejecutivo comunitario una "queja formal" por las declaraciones del primer ministro griego, según informaron fuentes del Gobierno.