Jueves, 25 de abril de 2024
Al menos tres manifestantes fallecen en Mandalay tras el uso de fuego real por parte de las autoridades
Birmania sigue sumando muertos por la represión de las protestas contra la junta militar
En la ciudad de Mandalay, una de las principales del país, al menos tres personas han muerto --según 'Frontier Myanmar'--, después de que las fuerzas de seguridad utilizasen fuego real para reprimir una concentración contra la que también se han lanzado pelotas de goma y gases lacrimógenos.
La represión también se ha extendido a otras ciudades como Rangún, sin que las autoridades den muestra de bajar el nivel de violencia policial a pesar de que teóricamente la junta reclamó públicamente a las fuerzas de seguridad que no utilizasen balas reales para contener las manifestaciones --o al menos salvo amenaza evidente para su integridad--.
La oficina de Derechos Humanos denunció que solo el domingo perdieron la vida 18 manifestantes, mientras que la cifra de detenidos desde el golpe supera ya los 1.200, entre ellos la anterior líder 'de facto' del Gobierno, Aung Suu Kyi, y el expresidente Win Mynt, según un recuento publicado por el portal 'The Irrawaddy'.
La crisis birmana protagonizó el martes una reunión de ministros de Exteriores de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), que concluyó con un tímido y generalizado llamamiento a la estabilidad, y también está previsto que el asunto sea tratado por el Consejo de Seguridad de la ONU, previsiblemente el viernes y a puerta cerrada, según la agencia DPA.
noticia
Columnistas
Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate
Por Enrique García MáiquezLeer columna
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna
No sé si las palabras del juez ponente del proceso del 11M -"hay cosas tan graves en el 11-M que por ahora es mejor que no se sepan"- están ahora más en vigor que nunca antes.
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
Un año más enviamos nuestra felicitación navideña a nuestros lectores
Por Editorial Leer columna
A propósito de este acuerdo vienen a la memori las palabras de San Agustín en La ciudad de Dios, si no se respeta la justicia, ¿Qué son los Estados sino grandes bandas de ladrones?.
Por José Luis LafuenteLeer columna
Las naciones no son entes abstractos sino productos de la historia y, como tales, objeto de construcción o destrucción
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
La actitud del Partido Socialista chileno hacia la democracia era en los 60 y 70 la misma que la del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Francisco Largo Caballero desde 1933: la democracia podía interesar como instrumento o puente hacia la dictadura del proletariado.
Por Francisco J Contreras Leer columna
En Asturias, la Sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia en sentencia 620/2023, de 29 de mayo, dictada en el recurso PO 791/2022, ha estimado el recurso formulado por el Arzobispado de Oviedo impugnando el Decreto 60/2022, de 30 de agosto.
Por José Luis LafuenteLeer columna