El consejero delegado del BBVA, Angel Cano, ha subrayado que en España "está en el tiempo de descuento" y no tiene "más prórrogas", por lo que ha instado a avanzar en la profundidad y la velocidad de una reformas "irrenunciables" para reducir la prima de riesgo de riesgo, generar un crecimiento sostenido y disminuir una tasa de paro "inaceptable".  

"Estamos en el tiempo de descuento, no va a haber más prórrogas y tenemos que hacer ya los deberes", aseguró Cano en una conferencia durante el encuentro "La reforma del sector financiero", organizado por KPMG y Expansión.  

En este sentido, reconoció que en España se han tomado las medidas en la dirección adecuada y destacó el cambio de percepción en los mercados sobre la economía española , gracias también a medidas adoptadas a nivel europeo.  

El consejero delegado del BBVA incidió en que España ha avanzado en las reformas, pero aún no ha recuperado la senda de crecimiento potencial necesaria para recuperar el empleo que hace falta. Así, subrayó que queda mucho por hacer, incluido en el sector financiero, que debe ser más eficiente y mas solvente una vez que haya concluido la crisis. 

  Entre otras medidas, apostó por potenciar el crecimiento para mejorar la productividad y la competitividad de las empresas, profundizar en la consolidación fiscal de las comunidades autónomas, asegurar un sistema de pensiones sostenible en el largo plazo y avanzar una reforma laboral destinada a crear uno de los mercados más flexibles de Europa.  

Respecto al mercado laboral, afirmó que esperan más de las actuales conversaciones que de la anterior reforma y reclamó una mayor descentralización y desconexión de los acuerdos colectivos, que los salarios estén ligados a la productividad, que se siga trabajando en un contrato único o una herramienta parecida y que se mejore la calidad del empleo. Al mismo tiempo, apostó por incentivar la formación y solucionar el problema del abandona escolar, superior al 30%.  

Por otro lado, recalcó que en Europa se ha pasado de dos tipos de países a tres: los que son el motor del crecimiento; los periféricos en proceso de ajuste, como España, y los rescatados. Así, incidió en que la presión sobre España se ha relajado, aún tiene que esforzarse por acercase más a los países que tiran de la economía del continente. 

  A este respecto, insistió en que España es diferente de los países que ya han sido rescatados por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y, aunque la prima de riesgo sigue estando elevada, se encuentra a mucha distancia de la de Portugal, Irlanda o Grecia, Además, tampoco se han producido revisiones a la baja del crecimiento económico como ha ocurrido con otros países de la periferia.