Con este paso, Bachelet cumple una de sus promesas electorales más polémicas.

   El proyecto permitiría interrumpir a las mujeres de forma voluntaria su embarazo en un plazo de hasta 12 semanas, menos en los casos de las menores de 18 años, que se ampliaría hasta 18 semanas, ya que "las niñas y adolescentes muchas veces desconocen su estado", ha explicado la mandataria.

   "Se trata de una situación difícil que debemos enfrentar como país  maduro", ha afirmado Bachelet en su discurso el Palacio de la Moneda. La mandatario ha subrayado que "no se puede obligar" a las mujeres a "cargar con las consecuencias de no poder decidir" como consecuencia de una ley, según ha informado el diario 'La Tercera'.

   La mandataria ha explicado que la actual normativa, que prohíbe el aborto sin excepciones, no respeta "el trato digno que Chile debe otorgar a sus ciudadanos ante estas situaciones". En este sentido, ha afirmado que "no es tolerable" que se condene con penas de cárcel a las mujeres "que se encuentran en esta difícil disyuntiva".

   "Además, los hechos han demostrado que la prohibición absoluta y la criminalización de todas las formas de interrupción de embarazo no han impedido ni impiden su práctica", ha recordado, subrayando que esta situación supone "un gran riesgo para la vida y la salud de las mujeres".

   Por otro lado, la gobernante ha hecho referencia a que cada año se hospitalizan en el país a más de 16.000 mujeres con embarazos de menos de 22 semanas que suponen un riesgo para la vida de la madre, además de la muerte de unas 500 mujeres por esta causa al año.

REACCIONES

   El proyecto de ley ha causado varias reacciones en el marco de la oposición. Varias diputadas han valorado de forma positiva el proyecto de ley al considerarlo un "avance importante" en materia de derechos sexuales y reproductivos.

   Es el caso de Camila Vallejo, que ha expresado su apoyo a la normativa afirmando a través de Twitter que "algunos piden respeto a la objeción de conciencia pero quieren obligar a una niña violada a ser madre".

   Sin embargo, la propuesta de Bachelet ha contado con una fuerte oposición de Unión Democrática Independiente (UDI), que ha criticado que "no respeta la dignidad humana". El diputado Jaime Bellolio ha afirmado que "no se trata de un tema religioso, es algo biológico que la vida humana comienza en el momento de la concepción".

   "Se piensa en al aborto como si fuera un método anticonceptivo, como si fuera una solución y yo no creo que sea una solución ahora para nada", ha subrayado Bellolio.